
Si bien considero que es practicamente imposible prevenir casos como este, pues en palabras de José Antonio Sacristán, estos son cometidos de «forma absolutista y fascista», sumado que las medidas de no aproximarse a la persona son un papel sin fuerza, es momento de que la Caja Costarricense de Seguro Social tome cartas en el asunto.
A la fecha no conozco un solo estudio de NINGUNA dependencia de esta Institución, sobre "Agresiones en el ambito sanitario", tampoco parece interesarle el tema a los Sindicatos, pues no manejan este tipo de información, no obstante el problema es real y el peligro latente.
Las profesiones sanitarias, son antiguas y no se percivieron en sus origenes como objeto de agresiones, dado que su razón de ser es la búsqueda del bien de las personas y esto debría generar buenas relaciones interpersonales.
No crea el lector que esta es la persección de quien escribe, pues tan alarmante han sidos los datos de este tipo de violencia que en el 2000 se produjo la primer respuesta internacional a esta realidad (CHAPELL, D., DI MARTINO, V (2003). Workplace Violence in the Health Sector. Geneva: ILO/ICN/WHO/PSI. http://www.who.int/…/vi…/interpersonal/en/WVguidelinesSP.pdf). Mientras tanto en Costa Rica día con día somos testigos de la creciente animadversión de las "personas" contra el personal sanitario y seguimos sin hacer nada.

En España los casos de médicos asesinados por no conceder una incapacidad laboral, enfermeras violadas a la puerta del hospital, facultativos 'secuestrados' durante horas en domicilios por no firmar un certificado de defunción, galenos apuñalados tras negarse a recetar un fármaco o apaleados casi hasta la muerte en 'ajustes de cuentas' por un diagnóstico no deseado... Son casos reales acaecidos en las consultas españolas en los últimos años (http://www.pacientesonline.org/medicina/noticias/nota390.php).
Nosotros no tenemos estadistica para saber que ha o no ha pasado, pero el fin de año fue el claro ejemplo de que la sociedad costarricense (la graderia de sol) va en la dirección de Eduardo de Dios, mientras la #CCSS no actua y a los sindicatos parece no preocuparle la integridad física de sus agremiados, el miedo al paciente se ha instalado y esta mas que justificado, en vez de paciente, esa persona puede ser tu victimario.